El drenaje linfático manual es una forma de masaje que favorece el funcionamiento del sistema linfático, crucial para una marcha eficaz del sistema inmunológico. Ayuda a combatir problemas circulatorios, piernas cansadas, edemas, artrosis, etc.
El sistema linfático es un eficaz sistema propio de limpieza del que dispone nuestro organismo, consiste en una extensa red de pequeños vasos que recorren nuestro cuerpo de manera paralela a los sanguíneos.
Por los 120.000 Km de vasos linfáticos circula la linfa que es la que se encarga de evitar la acumulación de grasas y toxinas en los tejidos.
Estos canales linfáticos forman una extensa trama que atraviesa diferentes puntos, llamados ganglios linfáticos, que se hayan repartidos por todo el cuerpo y ejercen una función de filtrado y eliminación de gérmenes nocivos y residuos celulares.
Funcionamiento del Sistema Linfático
Cuando la linfa se halla sobrecargada de sustancias tóxicas se vuelve más espesa y su circulación se estanca, por lo que el agua, proteínas y toxinas se acumulan en los tejidos, también existe patología cuando hay alteración propia del vaso linfático. Como consecuencia, aparece el edema, se hinchan las extremidades ,aumenta el riesgo de padecer infecciones así como de celulitis.
Cómo activar el sistema linfático y prevenir acumulación de líquidos
- Ejercicio físico : La linfa aprovecha el impulso de los músculos y arterias para moverse. Por ello es fundamental realizar alguna tabla de gimnasia( son muy buenos los ejercicios con las piernas en alto) o natación.
- Respirar profundamente : Para movilizar la linfa de la zona de tórax y abdomen( en esta zona está la cisterna de Pecket, que recoge la linfa de la parte inferior del cuerpo). Un par de veces al día durante 2/3 minutos sería suficiente.
- Duchas de agua fría: En sentido ascendente, desde los tobillos hasta las ingles. Se favorecen circulación venosa y linfática.
- Evitar excesos alimentarios : Para no saturar la capacidad depuradora del sistema linfático. Aumentar la ingesta de frutas y verduras y reducir la de proteínas animales.
Drenaje linfático en embarazadas
Esta técnica de masaje fisioterapéutico está indicada para las mujeres embarazadas que padecen un exceso de retención de líquidos durante la gestación. Los especialistas lo recomiendan en las últimas fases del embarazo, cuando los síntomas de hinchazón -que se producen, en especial, en los pies y los tobillos- resultan muy incómodos para la gestante e incluso impiden mantener la actividad habitual diaria.
El drenaje consiste en masajear las zonas afectadas para encauzar el líquido retenido hacia el torrente sanguíneo y, así, facilitar su eliminación por vías naturales.
Tratamiento:
Es una técnica de masaje manual desarrollada por Emil Vodder (fisioterapeuta) en 1932. Consiste en realizar una serie de maniobras suaves, lentas y rítmicas que activan y mejoran la circulación de la linfa hacia los ganglios facilitando la eliminación de toxinas y de exceso de líquidos.
Se puede aumentar la eficacia del tratamiento si se añaden programas de ejercicios de las extremidades, estando éstas en declive (elevadas por encima de la altura del corazón) ya que la contracción muscular más la acción de la gravedad favorece la circulación tanto venosa como linfática.
Es recomendable también el uso de geles para piernas cansadas, así como en determinados casos, el uso de gel frío.
Indicaciones del Drenaje Linfático
- Edemas (hinchazón de extremidades) de causa desconocida o de origen post-menopaúsico, más frecuente en tobillos y muslos.
- Durante el embarazo , para reducir la hinchazón y sensación de pesadez de piernas.
- Celulitis. El drenaje se acompaña de ultrasonidos (para deshacer los nódulos de grasa) y electroestimulación: corrientes de lipólisis (rompen los nódulos de grasa) y de tonificación de la musculatura
- Edemas post-quirúrgicos tras realizar liposucciones o extirpación de una tumoración. (Edemas de miembro superior por intervención en mama).
- Infecciones de garganta, sinusitis (porque se favorece la eliminación de gérmenes).
- Reducir los linfoedemas primarios y secundarios – estos últimos aparecen a menudo después de una intervención quirúrgica.
- Ayudar a desintoxicar el cuerpo, y reforzar y limpiar el sistema inmunológico.
- Reducir los linfoedemas primarios y secundarios – estos últimos aparecen a menudo después de una intervención quirúrgica.
- Ayudar a desintoxicar el cuerpo, y reforzar y limpiar el sistema inmunológico.
- Reducir el dolor, por ejemplo: el dolor de cabeza y el dolor de espalda.
- Mejorar las condiciones crónicas, por ejemplo: la sinusitis, la artritis, el acné y otras condiciones de la piel.
- Disminuir la hinchazón y la retención de fluidos, por ejemplo en tobillos y ojos.
- Ayudar a curar heridas y reducir hematomas.
- Mejorar las cicatrices y el aspecto general de la piel.
Contraindicaciones del drenaje linfático
- Infección aguda.
- Tromboflebitis.
- Descompensación cardiaca.
- Cáncer.
Drenaje linfático post-parto
El drenaje linfático es muy recomendable después del parto (incluso en los partos por cesárea), dado que como su objetivo es precisamente eliminar toxinas, desechos metabólicos y el exceso de líquido, los resultados de esta técnica serán muy satisfactorios y sobre todo si la mujer complementa el drenaje con una buena alimentación.
¿Cualquier mujer puede recibir sesiones de drenaje post-parto?
No. El drenaje linfático no se recomienda para personas que sufran algún tipo de enfermedad relacionada con el sistema linfático, insuficiencia renal, trombosis, o hipotensión que no esté controlada, entre otros casos.
Es muy importante que antes de iniciar una serie de sesiones de drenaje linfático, la mujer consulte con su médico para recibir este servicio con un terapeuta manual especializado en el drenaje post-parto. De esta manera, no correremos ningún riesgo innecesario que pueda afectar a la salud.
¿Donde puedo realizarme un Drenaje Linfático?
En el Centro de Salud y Binestar Sleimy, tenemos terapéutas especializados en el Drenaje Linfático
Teléfono de contacto 93 150 53 61
Barcelona